sábado, 30 de julio de 2011

Mis camisas a cuadros observan, colgadas de mi armario, mi día a día. Si hablaran podrían contar historias de miedo sobre una loca chica que se desahoga con paredes, monólogos graciosos a cerca de la niña obsesionada o dramas que tratan de unas lágrimas procedentes de unos ojos color miel y causadas por una canción triste.


"Pode que só sexa unha rapaza con moito tempo de lecer..."