viernes, 29 de julio de 2011

Mírame las manos, están muertas, inanes y agobiadas por el tiempo. Cógemelas y acércalas a tu espalda, quiero darte mi último abrazo, un hasta luego que nunca se repetirá.
No dejes que esa lágrima envenenada caiga por tu cara, guárdala para un llanto descontrolado mientras te ries de los recuerdos.
Piensa y dime qué fuimos realmente, ¿dos personas demasiado humanas como para impedir quererse o simplemente marionetas del destino?
¿Una luz? Que va, lo único que veo es tu cara sonriéndome mientras mis ojos se van oscureciendo poco a poco.
Recuerda, nunca nadie es perfecto pero tu [casi] has llegado a serlo.

"Pode que só sexa unha rapaza con moito tempo de lecer..."